Grupo De La Anunciación Y La Visitación De La Catedral De Reims

Las figuras parecían dar la bienvenida a los fieles en el acceso a la iglesia, una bienvenida alegre, llena de ángeles sonrientes y personajes de gestos afables. El escultor flamenco-borgoñón Claus Sluter y el gusto por el naturalismo marcó el comienzo del fin para la estatua gótica, evolucionando hacia el clasicista estilo renacentista a finales del siglo XV. En el siglo XIV la estatua gótica en España decae y consigue especificaciones propias tal como variaciones regionales. Predomina un cierto manierismo observable en el alargamiento y encurvamiento de las figuras. Por este motivo, la mejor estatua gótica en la España del siglo XIII hay que buscarla singularmente en los programas iconográficos de testeras y portadas de estas tres fábricas catedralicias. Este fenómeno de humanizacón y localización en el tiempo y espacio se percibe, si bien con signos opuestos, en las dos figuras mucho más representadas de la estatua gótica.

ANÁLISIS DE OBRAS DE ARTE. Esquema general para cualquier género de obra. Elementos destacados son las puertas de acceso y, más que nada, la torre. Crucificado gótico, se aprecia mayor naturalismo, cierto patetismo, interés por la anatomía y el movimiento. Prueba única de 60 días con acceso a la mayor biblioteca digital del mundo.

Arte De La Edad Media La Arquitectura Gótica En Francia

Solo han sobrevivido ciertas cabezas, hoy en día expuestas en diversos museos, con aspectos escultóricos similares, como los globos oculares con pupilas excavadas muy profundas y las cabelleras formadas por acanaladuras vermiformes delgadísimas. El gótico francés nace en datas tempranas del siglo XII, pero durante mucho más de un siglo, España vive cómoda y fielmente adscrita al tardorrománico y a la arquitectura cisterciense. Se decoran los lados de la cama funeraria, y esta apoya en figuras animales. Sobre la cama funeraria ser suele representar al fallecido en situación yaciente y orante. Se genera una humanización en los movimientos y reacciones de los personajes.

Dentro de la Catedral de Reims cabe destacar la Anunciación, la Visitación y el ascenso del rey. Estas proyectos son más naturalistas que la tercera, con un régimen de los pliegues esencial. La testera princial de la Catedral de Amiens es de excepcional hermosura merced a sus tres grandes portads de arquivoltas abocinadas.

A finales del siglo XI empezó a producirse un gran auge urbano en Europa. Hubo múltiples factores históricos que favorecieron el resurgir de las ciudades. Aquí destaca un increíble tímpano dividido en cuatro fajas pobladas de figurillas. Su ciclo iconográfico comprende la Anunciación, la Natividad, la Adoración de los Reyes, la Degollación de los Inocentes, la Escapada a Egipto, la Circuncisión, Jesús entre los doctores, la Presentación, el Bautismo, las Bodas de Caná y en el vértice el Tránsito de la Virgen. El parteluz de la puerta principal de la Catedral de León está la conocidísima Virgen Blanca. Es una habitual Virgen gótica plena de hermosura, alegría, armonía, humanización y naturalismo.

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En ella trabajó el “Maestro de la Sonrisa”, llamado de esta forma por la amabilidad y amabilidad de los rostros de casi todas las figuras cinceladas. El edificio gótico se construyó más o menos entre el año 1211 y el 1275. Se cree que todo el grupo escultórico se efectuó entre 1225 y 1245. La portada meridional, dedicada a la Pureza de María, es novedosa por el hecho de que en su tímpano se colocó a la Virgen con el Niño flanqueados por dos ancianos en lugar de la figura de Cristo.

Seguramente se trata de una adaptación de la iconografía bizantina de la Virgen Blaquernitissa, que exhibe a Cristo en su seno antes de su nacimiento. El grupo de Caleruega se constituye de 2 esculturas de bulto redondo hechas en piedra caliza policromada. El autor anónimo se ha preocupado de capturar las expresiones de los rostros y en dar distinción a los pliegues de los ropajes, que se incrementan merced a la policromía. El portal central está dedicado al Juicio Final y es increíblemente abigarrado. La escena del tímpano, dividida en tres niveles, está dominada por la figura de un Cristo Juez entronizado en su parte de arriba, a los pies del cual hay cinceladas multitud de figuras representando a condenados, bienaventurados, monstruos, santurrones, ángeles y demonios. En las dovelas de las varias arquivoltas están cincelados el cielo y el infierno con gran imaginación y en las jambas se ubican las figuras de bulto redondo de los apóstoles y los profetas mayores ubicadas sobre peanas y bajo doseles imitando arquitecturas.

En la situacion de la Virgen con el Niño, María adopta la forma de madre alegre y cariñosa que atiende a su hijo con amor maternal. Es simple encontrar leves e inclusive abiertas sonrisas en su rostro. Por contra, Cristo aparece débil como un hombre normal enfrentado a su muerte.

Los condenados aparecen esculpidos en la arquivoltas de la sección izquierda formando un grupo que da una sensación de caos, desorden y agitación, mientras que los bienaventurados aparecen en las arquivoltas de la derecha, representados de forma más sosegada y ordenada. La fachada entera tiene una enorme pureza de líneas y es muy equilibrada. Las esculturas se localizan solo en las portadas y la galería de los reyes, dejando el resto de la fachada lisa. Siendo la iglesia principal de la región, su ejecución es de una extraordinaria calidad y un líder para la estatua gótica de toda Europa.

La Estatua Gótica En Francia

El surgimiento de las órdenes mendicantes provocará una nueva religiosidad fundamentada en el acercamiento del hombre como camino de Dios, en el que los santos y la Virgen van a ejercer de intercesores y de ejemplo con sus vidas. Esto va a dar como resultado la necesidad de narrar mediante grandes ciclos ornamentales tanto las vidas de estos como la del propio Cristo. Además, el papel de las Universidades, con el surgimiento de la Escolástica, dotarán de mayor base teorética y teológica a los temas representados. Pensemos en lo primordial que fueron los textos de San Bernardo para la iconografía de la Anunciación en el mundo occidental, como hemos comentado al hablar de la Historia de historia legendaria Dorada.

Cerca de 1180 la estilización románica evolucionó hacia un intérvalo de tiempo de transición en el que las esculturas han comenzado a asumir una sucesión de rasgos naturalistas como la gracia, elegancia, solemnidad, sinuosidad y independencia de movimientos. Este estilo ‘clasicista’ acabó en la primera década del siglo XIII en las series de esculturas de las portadas de los transeptos norte y sur de la catedral de Chartres. Aunque la estatua románica de la segunda mitad del siglo XII y comienzos del XIII exhibe un creciente naturalismo, como queda patente en las situaciones de la Anunciación de San Vicente de Ávila y Silos, no se pude charlar todavía de estatua gótica propiamente esa. Sólo el Profesor Mateo, en el Pórtico de la Gloria, exhibe apuntes de un mayor goticismo en sus apóstoles levemente sonrientes y “conversadores”.

Las estatuas con su monumentalidad y su dinamismo acaparan toda la atención del visitante. El portal sur está destinado a la Virgen María, representándose escenas de su historia. Las figuras de las jambas situadas en la parte izquierda de la puerta son las mucho más destacables de toda la portada. Están emparejadas e interactuando entre ellas, como las de la catedral de Reims y representan las situaciones de la Anunciación, la Visitación y la Presentación de Jesús en el Templo. El portal norte está dedicado a San Fermín, obispo de Amiens en el siglo IV, que está esculpido en el parteluz.