Si tienes una vajilla muy neutra, por poner un ejemplo, de platos blancos y beige en su totalidad, puedes poner uno o 2 elementos ornamentales de el color que mucho más te guste o que consideres que queda bien en la estancia. No olvides que en decoración es cuestión de probar. En este comedor, por poner un ejemplo, en lugar de un aparador o vitrina se han elegido -con la misma función- un par de cajoneras altas idénticas. Son muy ornamentales, encajan con la estética industrial del ambiente pero hay que entender que lo que puedes guardar en el interior está marcado por la altura de los cajones. Un diseño particular tanto para un aparador como para una vitrina hará que todo el salón o comedor se llenen de estilo y personalidad. Sí, porque en este caso, en el salón, una vitrina es el mueble primordial y no almacena menaje dentro.
Si no deseas, o no puedes poner un espéculo grande, también puedes personalizar encima del aparador con espejos mucho más pequeños. Fíjate bien en la escena de arriba de estas líneas y mira la proporción entre aparador blanco rústico con encanto y el espejo redondo. Por este motivo he preparado este producto con 26 ideas para adornar un aparador, a fin de que consigas tomar nota, inspirarte y decorar el tuyo con estilazo, sacarle el máximo provecho decorativo y presumir de rincón.
Entre Aparador Y Vitrinas: Líneas Difusas
Si la vitrina tiene puertas de cristal, estas fuentes además de esto te servirán de adornado de fondo. El poto es la planta idónea para adornar un aparador alto, pues podemos dejarla medrar a lo ancho y no a lo alto, y además de esto, hacer que alguna rama cuelgue por el mueble hacia el suelo. Y esto, en los muebles altos, queda espectacularmente bien. Sencillamente colócalo en el centro del aparador en la pared, y luego adorna a los lados con ciertos bonitos elementos decorativos a juego con el estilo decorativo de tu casa. Para ello, en vez de ponerlo en la pared, apóyalo en el mueble, tal y como si fuera un elementos ornamental mucho más, y de esta forma lo integrarás de manera perfecta, aunque sea pequeño y no guarde proporción con el aparador.
Los aparadores encajan como cómodas en un dormitorio o como mueble para los audiovisuales en el salón. En este emprendimiento de Chango & Co. el contenido de la vitrina en metal negro mezcla algo de cristalería con libros puestos de madera que los de cubierta más atractiva se luzcan y decoren. En espacios pequeños, para que sepas de qué forma seleccionar aparadores y vitrinas, opta por diseños de poca altura y, si la tienen, con patas altas -que dejan la parte baja despejada-.
Patinada Para Ofrecerle “años”
Siendo de corte viejo y madera obscura, los libros blancos le dan ligereza y la modernizan. En lugar de decorar la pared con cuadros, hazlo con una vitrina, como aquí. Te va a dar un plus de almacenaje, llenará la pared sin abigarrarla y, si pintas su fondo como la pared del comedor, lograrás integrarla mejor en el espacio. La vitrina perfecto para almacenar vajillas tan hermosas como esta.
Pero todo funciona mejor merced a la estantería en blanco y madera alta que hay a la derecha. Si no estuviese la planta, la altura del cuadro resaltaría considerablemente más, pudiendo quedar mal. Pero al añadir la planta, todo toma coherencia. Pero un acierto seguro en el momento en que el cuadro es grande, especialmente a lo prominente, esto es, en su verticalidad, es ponerlo apoyado en el aparador. Por eso y por el hecho de que el aparador de madera tallada con formas geométricas es increíble, todo hay que decirlo.
Procura dejar medio centímetro entre piezas para evitar golpes entre ellas y que se desportillen. Como puedes observar, no es un cuadro altísimo ni muy grande. Un excelente ejemplo lo observamos arriba de estas líneas, en el aparador alto al que se le puso encima como motivo ornamental principal un cuadro. ¿Sabes que otro elemento de esa escena provoca que el cuadro quede bien integrado en el aparador a pesar de ser un cuadro altísimo?
Si bien tengan diferentes tamaños, va a quedar bien, de hecho, todavía se va a ver mucho más alegre. Lo idóneo es meter lo que no uses muy a menudo para evitarte incomodidades. Un mueble así a lo alto va genial que sea vitrina para que sea más rápido a la vista.
Aquí, al ser dos vitrinas bajas y con mucho cristal, no resultan pesadas. Queda bien esta combinación en hierro y madera. Aquí, la vitrina tiene unos cajones en madera para almacenar la cubertería. Un toque caluroso que le va que ni pintado a la cocina del diseñador de Kökdeco Héctor Aguirre. Solo las sillas la acompañan en el color. Una alacena en blanco, por grande que sea, nunca se verá enorme y logrará añadir luz a cualquier espacio.
Si bien voluminosa, tiene poco fondo para no entorpecer el paso. En el interior las cajas y cestas son un acierto para organizar el contenido. Organiza las copas, los vasos, las tazas y las jarras por tamaño. Pone las más grandes y altas en el fondo de la vitrina por el hecho de que poniendo las pequeñas enfrente de cada estantería, vas a tener el hueco bastante para sacarlas toda vez que lo necesites de manera cuidadosa. Así vas a poder ver a fácil vista todo cuanto tienes, nada va a quedar muy escondido detrás de otras piezas de la cristalería o vajilla. La más eficaz, es usando el recurso de la asimetría.
¡esta Vitrina Tiene Truco!
Solo de esta manera conseguirás ese efecto de “casa de gaceta”. Procura guardar la cristalería en una vitrina de tal manera que no quede expuesta al polvo, en especial esos platos y vasos que no uses diariamente, puesto que quedan más atrás que los que sí usas todos los días. Jura que las puertas de tu vitrina cierren bien y recuerda cada cierto tiempo sacar todo del mueble, limpiarlo a fondo y volver a poner todo bien. Disponer ganchos en la vitrina es buena opción para poner la cristalería. Ponlos en el techo de los estantes que quieras para colgar copas y tazas sin temor a que se caigan o logren dañarse. Deberás medir bien el espacio que hay entre una estantería y otra y el tamaño de las piezas a colocar para lograr elegir el más destacable género de ganchos para esa estantería.